jueves, 10 de mayo de 2012

Relato corto


 En una habitación decorada tan solo por una silla con ruedas, unos ficheros llenos de archivos y una mesa de  despacho se encontraba un hombre de unos treinta y pico años, de pelo castaño rojizo, con perilla, unos ojos verdes y unos rasgos fuertes. Sentado en la silla y con los pies en la mesa volvió a leer el informe: Cirujano Negro: Caso abierto. Inspectores en el caso: Zack Laroche y Bobby Netvor. Fénix-Arizona. El hombre siguió leyendo datos sin importancia. Pegaron a la puerta y por ella entro otro hombre; de estatura media, más o menos de la misma edad que el otro, algo flaco con sus pelos negros como el carbón y unos ojos verdes grisáceos muy distintos a los de su compañero.

-¡Zack, tenemos a otra!-gritó mientras se ponía una chaqueta azul oscuro- un tal Lirian Cassidi.

Zack se levantó corriendo y siguió a su compañero fuera de la comisaría. Entraron en un viejo coche de policía, Zack se sentó de copiloto y su amigo cogió el volante.

-Bobby ¿Por que has llegado tarde?-Preguntó Zack

-Lo siento-dijo el otro algo incomodo- se me pegaron las sabanas.

Zack rió y pensó en Bobby, su compañero; lo trasladaron a su comisaría hacía dos años, y se había puesto a trabajar directamente en el caso del Cirujano Negro. Su actitud enérgica y positiva los había convertido en buenos amigos. Pararon en uno de los barrios no muy recomendables de la ciudad. Bobby se dirijió a una callejuela seguido por Zack.

-Bueno, dime algo más de la víctima- pidió Zack

-Una joven de veintidós años, de familia rica y malas compañías; y el resto, me temo que como siempre, extracción de órganos internos con una precisión quirúrgica y que seguramente se venderán en el mercado negro.

Bobby abrió la puerta que había al final de la callejuela. Ya dentro de la estancia Zack se dio cuenta de que estaba totalmente vacía.

-Bobby, colega ¿Y el cadáver?- Dijo mientras se giraba hacia Bobby.

Este se había quitado la camiseta y unas extremidades que terminaban en unas cuchillas se despegaban de los laterales de su torso, el cual se convertía en una enorme boca dentada abriéndose verticalmente.

-Oh no,-escupió con voz gutural aquella horrenda criatura-Bobby se ha ido- Y avanzó hacia Zack.

                                                                   The end?

Este es un relatito que hice para un concurso del colegio, no se si ganare, pero no me importara sino lo hago ya que me siento orgulloso de este relato.=)

                                                                                              

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